Nuestra Historia
1876
Cómo empezó todo…
La historia de Anís de Raza se remonta al año 1943, pero para conocer su historia hay que viajar hasta el año 1876, fecha en la que comienza en la familia el arte de la destilación, creando una marca y dando nacimiento a una destilería que, a día de hoy, aún perdura entre las firmas ruteñas y que fue fundada por Rafael Reyes Rodríguez.
1900
Principios Siglo XX
A principios del siglo XX, Rafael Reyes, forma sociedad con su hijo Antonio Reyes y con su yerno Diego Molina Rueda, denominándose esta “Rafael Reyes e Hijos”, de la cual, a principios de los años XX, sale Rafael Reyes Rodríguez, tomando su parte su hijo Rafael Reyes Jiménez, pasando a denominarse la sociedad “Hijos de Rafael Reyes”.
Al poco tiempo, muere el socio Antonio Reyes, y los herederos reclaman su parte, la cual se la abonan y quedan como socios únicamente Diego y Rafael.
1940
Tiempos de cambio
Dicha sociedad duró hasta 1940, fecha en la que se disuelve y se reparten las propiedades, ya que la sociedad era propietaria de una gran finca rústica. La familia Reyes se quedó con la destilería y la familia Molina con la finca.
Según los estatutos establecidos, la parte que saliente de la sociedad, no podía establecerse como fabricante hasta pasados tres años.
Durante este tiempo, la familia Molina se instala en una pequeña destilería en la calle Fresno, en una pequeña casa junto a la guitarrilla. Durante este tiempo, la marca que se comercializa es Anís la Cibeles, y figura como propietario Juan Ferrándiz Díaz.
1943
Nace Anís de Raza
Pasados estos tres años, Diego Molina Rueda crea una nueva destilería para su hijo, Diego Molina Reyes, y se instala en la calle Colón nº6 y Fresno nº 51. A pesar de haber cursado carrera universitaria, Diego Molina Reyes siempre estuvo muy pegado a su padre y pudo conocer a fondo el negocio, lo que le llevó a decantarse por este.
En su comienzo, se registran dos marcas: Anís del Nieto, bajo la razón social “Diego Molina Reyes y Nieto de Rafael Reyes Rodríguez” y Anís de Raza.
Debido a diferentes conflictos e intereses familiares, la marca Anís del Nieto tuvo que ser retirada, inhabilitando su uso para ambas familias, ya que, tras la muerte del abuelo, cualquier parte podía utilizarla por derecho hereditario. Por lo tanto, se renuncia a esta marca y al nombre comercial “Nieto de Rafael Reyes Rodríguez”.
Tras esta renuncia, queda únicamente la marca Anís de Raza, bajo el nombre comercial “Diego Molina Reyes, tercera generación de fabricantes”. Tercera generación obtenida por parte de Rafael Reyes Rodríguez y por parte de Diego Molina Moreno, padre de Diego Molina Rueda, que también fue fabricante un tiempo hasta finales de 1890.
Así es, que Anís de Raza nace en 1943 con mucha fuerza e ilusión por hacerse un hueco en el panorama nacional. Desde un principio se apuesta por publicitarse en prensa, radio, tranvías en distintas ciudades y se establecen rutas comerciales que en su mayoría abarcan Andalucía, Extremadura, Ciudad Real y la parte del Levante. Zonas que hoy en día, gracias a aquel trabajo inicial, se mantienen como rutas de ventas.
Los inicios no fueron sencillos, pues España acababa de pasar la Guerra Civil, y existían muchas penurias y problemas económicos, pero la situación se fue remontando durante los años cincuenta y mejoraron considerablemente en los sesenta, con el crecimiento de la economía, sobre todo, gracias al sector de la construcción.
1974
4ª Generación
A finales de los años sesenta, el hijo de Diego Molina Reyes, en su caso, Diego Molina Pérez, deja los estudios y se acerca a su padre y al negocio, conociéndolo en todos sus ámbitos, desde la venta y distribución hasta la administración de la empresa pasando por la destilación.
Así fue pasando el tiempo, hasta que, en el año 1974, el padre se retira por su edad y cede el testigo a su hijo, dando paso a la que sería la cuarta generación de fabricantes.
En este momento se dota a la destilería de un nuevo impulso para aumentar su expansión, lo que lleva a la contratación de comerciales para cubrir más territorio de ventas y de forma más adecuada.
Por ello, la fábrica existente comienza a quedarse pequeña y se tiene que adquirir una casa anexa, en calle Colón nº 8, perteneciente a los herederos de Rafael Ariza, para establecerla como almacén.
1980
Nueva Fábrica
No obstante, Raza seguía con su crecimiento y la fábrica seguía quedándose chica, lo que conlleva en 1980 a trasladarse a un solar de 1300 metros cuadrados, heredado por Diego Molina Pérez, y que es dónde a día de hoy aún se mantiene la destilería, y en el año 1983 se constituye como sociedad anónima.
1990
Años 90
Con la llegada de los años noventa, el consumo de anís disminuye y aparecen nuevas bebidas exportadas que contribuyen a este descenso por lo que las rentas empiezan a disminuir. La aparición de estas bebidas conlleva a tener que competir con grandes marcas internacionales, lo que, unido a la gran presión fiscal, pues los impuestos eran aumentados continuamente, hacen muy difícil mantener el negocio.
Pero, aun así, Raza sigue adelante, beneficiándose de la desaparición de otras marcas ruteñas que no pudieron aguantar la presión o no encontraron generaciones que siguieran al frente de las empresas, y debido a que la marca Rute siempre ha estado en valor por su calidad y permite mantenerse junto a grandes multinacionales.
2020
5ª Generación
En la actualidad, la historia vuelve a repetirse y es en el año 2017, cuando tras acabar sus estudios de Magisterio, José Manuel Molina, hijo de Diego Molina Pérez, llega al negocio y empieza a conocerlo en todos sus ámbitos. Este, recibe plenos poderes de administración en el año 2020, año en el que, por motivos de salud, queda en la gerencia en plena pandemia por la Covid-19.
José Manuel Molina representa la quinta generación de la firma. Su empeño está en expandir más la marca por el territorio nacional y empezar a medio plazo a darse a conocer en el ámbito internacional. Para ello, se está llevando a cabo una modernización de la imagen de la marca, se está apostando por la digitalización y se están sacando nuevos productos con vistas a crear nuevos consumidores y se trabaja en la mejora de la producción y rentabilidad de la misma. Así mismo, también se está apostando por una línea de productos Premium que permitan abrir el abanico de oportunidades.
2023
… en la actualidad
En el año 2021, y a nombre de la sociedad, se registra la marca “Mezquita gin córdvba, una ginebra de Raza” para iniciarse en la destilación de ginebra.
Eso sí, siempre se mantienen la tradición a la hora de destilar, el esmero en su proceso y la minuciosa selección de materias primas y se seguirá apostando por los productos anisados de primera calidad.